21
Nov

Lo que Nuestro Cuerpo Dice Sin Palabras

Nunca tomé tanta conciencia sobre el poder del lenguaje corporal, hasta el día que me di cuenta de que podía ser rechazada sin decir una sola palabra. Esta experiencia la viví en el espacio profesional, pero por respeto, me guardo los detalles. Sin embargo, lo que sí puedo compartir es que, por una cuestión de pura suerte, se me presentó la oportunidad de mostrar quién soy y qué hago. Al conversar, la situación dio un giro radical: hicimos rapport, en esos tiempos no conocía todavía de esta técnica, que es un fenómeno de conexión y comunicación. El que me entrevistaba entendía o no lo que hacía, eso nunca lo voy a saber, solo recuerdo como mi cuerpo de manera natural se acomodó, se sintió cómodo, y pude dejarme ver de verdad. Esto, como muchas otras cosas, no lo entendí hasta que las viví.

Hoy, sin ningún tipo de romanticismo, te escribo sobre el tema.

Nuestro cuerpo comunica el 55% de la información que compartimos, 38% pertenece al tono de voz y solo 7% a las palabras, quiero que sepas que a diario hay personas que se acercan o se alejan de nosotros sin que intercambiemos una sola palabra. A diario perdemos o ganamos oportunidades, gracias a la información que el cuerpo comunica.

Vayamos al fondo, a lo más grandote y desafiante de gestionar, EL CUERPO ¿Qué almacena el cuerpo? Emociones. Esas emociones, muchas veces, se desatan de conversaciones internas. Un claro ejemplo es cuando tenes una entrevista de trabajo. No importa si te postulas para un puesto de atención al cliente o para gerente, los nervios y la inseguridad producto de las conversaciones internas pueden jugarte una mala pasada. El cuerpo, sin que le pidas y sin permiso empieza a dar señales de lo que sentís: tensas tus hombros, cruzas los brazos, miras hacia abajo. Esas señales son un mensaje claro, y aunque no hayas dicho nada, ya comunicaste algo importante: INSEGURIDAD.

La buena noticia es que podemos entrenar nuestro cuerpo para enviar los mensajes correctos. Acá te dejo algunos tips que te pueden ayudarán a mejorar tu comunicación no verbal:

  1. Mantener una postura abierta. Si cruzas los brazos o te encorvas, tu cuerpo está enviando señales de inseguridad o de estar a la defensiva. Mantené los hombros relajados y la espalda recta. Esto proyecta confianza y disposición.
  2. Contacto visual. Mirar a los ojos a tu interlocutor es una de las formas más poderosas de transmitir seguridad y sinceridad.
  3. Controla tu respiración. Cuando estamos nerviosos, nuestra respiración se vuelve rápida y superficial. Esto afecta nuestra capacidad para pensar con claridad. Practica respirar profundamente, si te animas, te cuento que hay una respiración que es fantástica de 4 tiempos, podes buscar en tiktok, de verdad, por Dios que funciona.
  4. Una sonrisa genuina. Una sonrisa auténtica es una herramienta poderosa para romper el hielo y generar un ambiente positivo. Además, puede ayudarte a relajarte, ya que envía señales al cerebro de que todo está bien, reduciendo el estrés y la ansiedad.
  5. Escucha con el cuerpo. El lenguaje corporal no solo se trata de lo que estás comunicando, sino también de cómo percibes las señales del otro. Asentir con la cabeza, mantener una postura receptiva y demostrar interés genuino en lo que el otro dice, son formas de comunicarte efectivamente sin palabras.
  6. Ropas que te gusten: Créeme, la ropa por más linda que sea, si no te sentís a gusto tu cuerpo lo cuenta, es casi igual a que lleves un cartel enorme contando “esto que tengo puesto no me gusta”

Entender y trabajar el lenguaje corporal no es solo una cuestión de mejorar nuestra comunicación con los demás, sino también de tomar conciencia de cómo nos sentimos en cada momento. A veces, nuestro cuerpo puede traicionar nuestras emociones más profundas si no prestamos atención a los mensajes que nos envía. Al practicar una comunicación más consciente con nosotros, no solo mejoramos nuestra interacción con el mundo, sino también nuestra relación con nosotros mismos.

  • La próxima vez que estés en una situación importante, recorda que tu cuerpo está hablando, incluso cuando no lo estés haciendo. El arte de dominar tu lenguaje corporal te va a permitir ser mejor percibido por los demás, sino que también vas a aumentar la confianza de ser fiel a vos mismo/a, sin tener que decir una sola palabra más.

Si llegaste hasta el final, GRACIAS por leerme.

Marie.